«Laudato Si’», la encíclica con más éxito

Un año después, el texto papal sigue marcando la agenda mundial sobre medio ambiente

El próximo sábado, la encíclica «verde» del Papa Francisco, «Laudato Si’» cumplirá un año. Tan sólo doce meses en los que ha logrado tal impacto a todos los niveles que el canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias, el arzobispo Marcelo Sánchez Sorondo, confiesa a LA RAZÓN en una entrevista que «es la encíclica que más éxito ha tenido». Sorondo, que ha recorrido el mundo presentando el texto papal, viajó recientemente a España invitado por la Red Española para el Desarrollo Sostenible para hablar, precisamente, de la «Laudato Si’». «Además de en el pueblo, ha tenido una decisiva influencia en la redacción de los nuevos objetivos del milenio para el desarrollo sostenible. De hecho, están inspirados en la encíclica. Tanto el Papa como la Academia de las Ciencias somos los primeros en reconocer que la actividad humana ya no sólo influye en el clima, sino que lo determina. En el COP21 de París, el Papa cambió las cosas», añade.

Pero no lo dice sólo un arzobispo católico, también figuras como el cineasta y fotógrafo Wim Wenders, que llegó a decir que la encíclica del Papa «es uno de los documentos más importantes del siglo». Wenders participa en un libro en el que da su visión –junto a filósofos, periodistas y artistas– sobre la «Laudato Si’», y que será presentado mañana en Milán.

Por su parte, Sánchez Sorondo participará en la actividad estrella de la «Semana de la Laudato Si’» que organiza el Movimiento católico mundial por el clima desde hoy y hasta el domingo: un congreso on-line sobre la encíclica en el que también intervendrán el cardenal Peter Turkson, presidente del Pontificio Consejo Justicia y Paz; científicos y representantes de las distintas religiones. A esta propuesta se añadirán otras muchas a nivel local y que se pueden consultar en la web creada para la ocasión. En concreto, en España hay registrados dos eventos: uno en Sevilla y otro en Madrid.

Según explica el canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias, el gran acierto del Papa con esta encíclica es que «toca los problemas más sensibles del mundo de hoy: la energía, la casa común, la globalización de la indiferencia, el cambio climático y sus consecuencias en forma de injusticias, nuevas formas de esclavitud...». Otra de las novedades que incluye Francisco y que merecen ser recalcadas por encima del resto, tal y como estima el arzobispo argentino, es que «el Papa asume cuestiones que vienen de la ciencia y las convierte en parte de su magisterio». En este sentido, y ante los que critican al Papa y sólo consideran su encíclica como opiniones personales, añade que no ve la diferencia en lo que hace en este caso con la ciencia y con lo que los diferentes pontífices, y él mismo, han hecho con la filosofía. «Hay católicos, incluso de comunión diaria, que producen petróleo a los que no les ha gustado la «Laudato Si’». Algunas familias petroleras católicas, además, han intentado impedir que el Papa hable claro. Y cuando lo hace, sostienen que no es magisterio, sino una opinión. No es así. No tiene valor dogmático, pero es magisterio», añade.