Cartas sobre proyectos de ley Mancomunidad Municipal y Promoción para la Fusión de Municipalidades Distritales

La Asociación Servicios Educativos Rurales (SER) nos ha hecho llegar las cartas que fueron remitidas a los congresistas de la República sobre los proyetos de ley: Incentivos para la Mancomunidad Municipal (Nº 210/2006-CR) y Promoción para la fusión de municipalidades distritales (Nº 169/2006-CR).

Adjuntamos un extracto de cada una de ellas, así como las cartas completas en versión pdf.

La fusión de distritos es necesaria para la elaboración de propuestas de desarrollo viables, tanto desde el punto de vista de la gestión pública como de las posibilidades de inversión y del diseño de políticas territoriales. La atomización de las municipalidades dificulta la coordinación de propuestas de desarrollo para un ámbito común, la óptima utilización de recursos de un territorio, y la consolidación de gobiernos locales con capacidad institucional para garantizar una gestión pública eficiente. Sin embargo, el tema de la fusión de distritos no se reduce al aspecto técnico, sino que están involucrados percepciones, necesidades y anhelos de la población. La fusión de distritos es parte de un reordenamiento territorial, y éste debe ser pensado no sólo desde el punto de vista de los funcionarios públicos, sino desde el punto de vista de la gente.

Existe un fuerte sentimiento localista en país, intereses de poderes locales, demandas y necesidades concretas de la población. Es importante considerar, por ejemplo, que una de las principales preocupaciones de la población es tener al alcance los servicios que brinda la municipalidad, sobre todo en las zonas rurales del país donde existen poblados muy alejados de las capitales distritales; éste es un problema que la propuesta no recoge.

La fusión de distritos debe ser concebida como una etapa posterior al ordenamiento territorial. Es necesaria una revisión del actual marco normativo, así como contar con un diagnóstico de los avances en los temas de organización y demarcación territorial, para evaluar los pasos previos pendientes, así como asegurarse que no existan contradicciones entre éstos y la iniciativa legislativa.

En primer lugar, queremos expresar nuestro acuerdo respecto de la importancia de la mancomunidad municipal, para mejorar la prestación de servicios municipales, pero también, para fortalecer el rol de los gobiernos locales en la gestión del desarrollo. A partir de nuestra experiencia de trabajo con gobiernos locales, quisiéramos contribuir con esta iniciativa legislativa alcanzando las siguientes observaciones y sugerencias:

• El proyecto de ley define la mancomunidad como una asociación voluntaria para la prestación de servios o ejecución de obras de su competencia. Desde un enfoque de desarrollo y gestión territorial, esta definición podría complementarse realzando el rol de las mancomunidades como promotoras del desarrollo, no solo en la búsqueda de la inversión pública y privada, sino, además, en la articulación de actores económicos y dinamizando la economía local. ....


• Consideramos que los incentivos propuestos en el proyecto de ley, no serán percibidos como “incentivos reales” por las municipalidades. Los incentivos deben orientarse hacia el tema de la inversión y plantearse a nivel presupuestal. Debe proponerse, por ejemplo, fuentes de financiamiento a las cuáles las mancomunidades podrán acceder; señalar de qué beneficios concretos gozarán las municipalidades mancomunadas para gestionar recursos y proyectos de inversión, frente al resto de municipalidades.


• Los incentivos deberían centrarse en la optimización de la gestión de los proyectos mancomunados y de los servicios públicos, así como en la provisión de asistencia técnica.