Repensando el desarrollo del Noroccidente de Quito desde la Mancomunidad del Chocó Andino

Friday, 16 September, 2016 - 08:54
Según estudios de Jara y otros investigadores las primeras ocupaciones del noroccidente de Quito se dieron a partir de 1870. Entre 1900 y 1980 el paisaje empezó a cambiar principalmente por la extracción de madera para la elaboración de carbón y uso en la construcción, para 1940 inició el monocultivo de caña y en 1970 tomó fuerza la ganadería vacuna (SIPAE, 2013). La ocupación del territorio noroccidental respondió a las estrategias de desarrollo impulsadas por los distintos gobiernos nacionales que consistían en apertura de vías, e impulso de actividades agropecuarias a gran escala, como ejemplo, entre 1964 y 1992, el entonces Instituto Ecuatoriano de Reforma Agraria (IERAC) promovía la deforestación como mecanismo para demostrar que se había trabajado la tierra, sólo las “tierras trabajadas” estaban sujetas a la adjudicación.
 
Simultáneamente a la deforestación, entre 1980 y 2000 surgen las primeras iniciativas de conservación, impulsadas por la comunidad y organizaciones no gubernamentales. Entre 1990 y el 2000 se realizaron algunos proyectos ejecutados por la Fundación Maquipucuna en Nanegal y Calacalí, mismos que promovieron capacitación en temas socioambientales en las comunidades locales, esto generó procesos organizativos comunitarios en Yunguilla y Santa Lucía, actualmente referentes dentro de la MCA y el Bosque Modelo.
 
A partir del año 2000 el Gobierno Autónomo Descentralizado de Pichincha y otras instituciones públicas en alianza con ONGs pusieron énfasis en la educación y la salud, existiendo aún grandes desafíos en estas áreas. Desde el 2007 se destaca la presencia del Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, que a través de su Secretaría de Ambiente ha liderado estrategias de conservación integrando a su planificación y gestión los enfoques ecosistémico, de ordenamiento territorial y de cuencas hidrográficas, trabajo que ha impulsado hasta la actualidad la declaración de 4 Áreas Protegidas y un Corredor Ecológico del Oso Andino. A partir del 2011, el Municipio de Quito intervino por primera vez en el territorio con un enfoque de Conservación y Uso Sustentable de los Recursos Naturales.
 
En el 2014 se creó la Mancomunidad del Chocó Andino (MCA) con el objetivo de consolidar un territorio productivo, sustentable y biodiverso convirtiéndose en uno de los principales hitos de este importante territorio y el espacio ideal para reflexionar y dialogar sobre el desarrollo de los habitantes de la MCA. Desde 1986 al 2009, se han perdido 17647,58 hectáreas de Bosques, pérdida que ha llevado a los dirigentes y a distintos actores locales a reflexionar sobre la importancia de cuidar la inmensa riqueza que aún nos queda a todos los quiteños.
 
Los bienes y servicios que provienen de los ecosistemas naturales son el hábitat para sostener las diversas formas de vida con alimento, materia prima, recursos energéticos y medicinales; permiten experiencias de recreación y esparcimiento además de cumplir con funciones de regulación fundamentales para permitir las diversas formas de vida como la regulación climática e hídrica, el mantenimiento de aire limpio, la depuración de agua, la prevención de inundaciones y el mantenimiento de tierras cultivables.
 
Es de vital importancia unirse para pensar, dibujar y cuidar un paisaje sustentable (Bosque Modelo) que nos permita generar desde lo local el bienestar de la población en armonia con la naturaleza.      
Work regions: 
Mountain Ranges: 

Facebook comments

randomness